A todos nos gusta ver nuestra ciudad limpia, radiante y hermosa; para poder lograr esto se necesita de obreros y trabajadores que a pesar de ese sol característico de nuestra adorada
Maracaibo, sudan por la limpieza de la capital zuliana. Detrás de su lucha diaria contra el inclemente astro que ilumina el día se encuentra su batalla para poder subsistir a los obstáculos de su quehacer; ellos son los salserines.
Todo ComenzóLos salserines son llamados así por los marabinos ya que trabajan de “sol a sol” que hace referencia a una
canción de un grupo venezolano muy importante como lo fue
Salserín. Este grupo de personas conformado por hombres y mujeres que con grandes franelas amarillas, para protegerse de los rayos solares, barren, podan el césped y mantienen las avenidas y calles de nuestra ciudad. Ellos están subscritos al Instituto Municipal del Ambiente (IMA) de la Alcaldía de Maracaibo laborando a través de contratos. El IMA fue creado en 1996 con 164 trabajadores y en la actualidad posee más de 2 mil obreros.
Los problemas de estos trabajadores sociales con los gobiernos han estado presentes a través de los distintos mandatos. A mediados del 2010, específicamente el
22 de marzo, salserines protestaron en tres grandes avenidas de la ciudad capitalina exigiendo la cancelación de todas las deudas contraídas en el año anterior, esta vez la ofensiva iba dirigida al gobierno del alcalde designado
Daniel Ponne. Nerio López, presidente del sindicato de los trabajadores del barrido manual, recordó que han venido reclamando esta situación; las deudas que demandan son vacaciones vencidas, fideicomiso, retroactivos, aumentos presidenciales y contractuales, entre otras, manifestó. La respuesta del burgomaestre se resumió en que no existía dinero para cancelar.
Este enjambre amarillo volvió a hacerse sentir el
21 de octubre del 2010 en un escenario de violencia, en el que los trabajadores de barrido manual descargaron camiones de basura frente a la Alcaldía de Maracaibo para obtener una respuesta del Alcalde Daniel Ponne generando solo una arremetida de la policía local y el rechazo de las acciones por parte del gobernador del pueblo zuliano Pablo Pérez.
Las protestas en octubre venían enmarcadas en las venideras elecciones del 5 de diciembre del nuevo alcalde de la ciudad marabina, donde Eveling Trejo de Rosales se enfrentaba al ex alcalde
Giancarlo Di Martino quien el
24 de Octubre en una rueda de prensa, antes de inscribir su candidatura, recalco que no funciona la Policía Municipal, los bomberos, e incluso los “salserines” ya que reclamaban los pagos que la Alcaldía les adeuda desde hace meses, expresando que “No es fácil explicar estos sentimientos, sin embargo, cuando uno sale a la calle y ve lo que está pasando, donde un grupo de hombres y mujeres quienes dan todo por limpiar las calles de la ciudad son atacados”, haciendo referencia a la arremetida de la policía contra los trabajadores, asegurando además que los recursos si llegaron.
Un nuevo gobierno, ¿nuevas oportunidades?Las elecciones el 5 de diciembre de 2010 arrojaron una nueva alcaldesa, Eveling Trejo de Rosales se alza con el triunfo. Pero las acciones del nuevo gobierno no se hicieron esperar. El 23 de Diciembre del 2010, la nueva Alcaldesa propuso la eliminación del IMA, órgano de la Alcaldía de Maracaibo.
El 14 de Enero del 2011 miembros del Concejo Municipal anunciaban a la colectividad, la reunión que sostendrían para discutir para determinar el futuro de la ordenanza de suprimir el Instituto Municipal del Ambiente (IMA) introducida por la nueva alcaldesa, ya que según Jesús Luzardo presidente del organismo; este instituto “se desnaturalizó en lo que son sus objetivos y prácticamente se convirtió en un organismo de limpieza de calles, cuando eso compete al Instituto Municipal de Aseo Urbano (
IMAU)”.
Las acciones de los miembros del IMA no se hizo esperar, estos trabajadores decidieron buscar la ayuda del gobierno nacional con la firme determinación que la alcaldesa tomo esta medida porque la mayoría de estas personas pertenecen a la banda oficialista. Extraoficialmente se conoció que un juez puede acusar de desacato a los miembros del Concejo Municipal que aprueben este decreto, ya que miembros del PSUV acompañaron a estos trabajadores, dirigiéndose a la Contraloría General de la República y a la Inspectoria del trabajo por considerar que esta medida violaba la sentencia de la jueza Gloria Urdaneta quien estableció en un texto que se debía respetar los derechos de los trabajadores.
El 21 de Enero de 2011 la presidenta del Instituto Municipal de Ambiente (IMA), Jamelis Ríos informo en un rueda de prensa que se había cancelado el pago de la semana correspondiente al 21 de enero de 2011, a dos mil 287 trabajadores del barrido manual, a pesar de que se estaba procesando la medida para eliminar este instituto. Ríos recalco que ““esta situación obedece a una situación financiera, de déficit presupuestario, que enfrenta la Alcaldía de Maracaibo y nunca por razones políticas. Sucede que el IMA, dentro del ayuntamiento marabino, tiene la mayor carga en el presupuesto”.
Ríos, de igual forma, expresó que su objetivo no es despedir a miles de trabajadores, sino darles la ayuda necesaria para que se organicen en cooperativas.
En esta misma rueda de prensa el presidente de la comisión de descentralización de la Cámara Municipal de Maracaibo, concejal Joaquín Chaparro, acota que esta medida se fundamentó en lo expresado en la Ley Orgánica de Régimen Municipal, en su artículo 95, ordinales uno y seis.
La alcaldesa de Maracaibo informó el
31 de Enero del 2011 al diario el Universal que la eliminación del IMA se debe a que “todo el dinero del situado constitucional de la Alcaldía de Maracaibo, no se puede dirigir a una sola dependencia municipal. El ayuntamiento marabino tiene 90 dependencias y direcciones. Tuvimos que tomar decisiones duras, pero por el bien del colectivo marabino, para garantizar obras y mejores servicios a favor de los habitantes de Maracaibo", agregó.
Al mismo momento se inicia una huelga de hambre por parte de los salserines quienes se encuentran en la sede de FUNSAMA (Fundación para el Saneamiento de Maracaibo), en un espacio donde existen camiones de basura con desechos tóxicos, por un costado pasa una cañada que desemboca al Lago de Maracaibo y el calor insoportable ya que se encuentran en un galpón.
Las reacciones de miembros del Partido Socialista Unido de Venezuela
(PSUV) no se hicieron esperar el 05 de febrero en un escrito electrónico el concejal Henry Ramírez expreso su denuncia a lo largo de los años, ya que para los miembros de este partido la ordenanza obedece a un fin político.
Paso lo que tenía que pasarEl 09 de febrero la alcaldesa firma de su puño y la letra la ordenanza, elimando así el IMA no sin antes explicar que los trabajadores están conformados en 8 cooperativas que se encargarían del aseo de la ciudad. Las reacciones ante este hecho no se hicieron esperar.
Los salserines que quedaron sin empleo comenzaron una serie de huelgas, el
15 de Febrero con carteles en mano y frente a la alcaldía protestaron exigiendo la devolución de sus empleos, de la misma forma, el
28 de febrero cerraron las principales avenidas de la ciudad, al igual que el
01 de Marzo que se colapso la Circunvalación 1 por la presencia de la protesta de los obreros del barrido manual.
Una historia sin fin.Los trabajadores solo piden el dialogo, ya que el
03 de marzo sindicatos afirmaron que cesarían las manifestaciones si la alcaldesa Eveling Trejo realiza mesas de dialogo obteniendo como respuesta que Trejo de Rosales tiene la disposición de iniciar las conversaciones, con la aclaratoria de que la supresión del Instituto Municipal de Ambiente (IMA) no tiene vuelta atrás. Mientras que Nerio López, líder sindical de los trabajadores del barrido manual, ofreció tregua por una semana.
Los diálogos entre la alcaldesa y los trabajadores aún no se han concretado, y aunque esta historia de la vida real sea larga y tediosa se ha convertido en materia de primera plana, por las distintas posiciones tomadas. El presupuesto fue una de las palabras claves para entender este mar de acontecimientos.
Se espera que en los próximos días todo llegue a un final feliz donde no valgan las ideas políticas, ni las comisiones de los sindicatos sea lo primordial, sino que se respete el derecho al trabajo, la integridad y dignidad de esas miles de personas que se quedaron sin empleo.